El placer de respirar

Concedernos un descanso mental entre periodos en los que le exigimos rendimiento a nuestro cerebro, ayuda a su funcionamiento y a nuestro bienestar.
Es una forma de darle aire, de podar aquellos pensamientos que nada aportan.
En el hogar de tardes tenemos en cuenta estos descansos estableciendo unos objetivos y metas acordes con su capacidad y desarrollo, sin saturar al niño o niña.
Porque a veces es necesario desconectar, dar un paso atrás, para volver a conectar y dar diez pasos para adelante.
Y mientras andan, siempre nos tendrán a su lado, cuidando y velando porque sean niñas y niños felices y se cumplan todos sus derechos.